De las 638 familias que el Gobierno prometió trasladar a hoteles, muchas esperan que les digan para dónde las llevarán
El miedo real de los habitantes de las urbanizaciones La Punta y Mata Redonda, que están ubicadas en las adyacencias del lago de Valencia, no es que el muro de contención se quiebre y se inunde la zona, sino que el Gobierno no los reubiquen rápidamente en los hoteles que prometieron o en las nuevas viviendas que les ofrecieron.
Ayer desde muy temprano un grupo de familias, que el martes tuvieron que abandonar sus casas debido al alerta de Protección Civil y de los miembros de la Comisión Presidencial para la Atención de la Contingencia del Lago, esperaba una respuesta en la entrada del Parque Sur, en Mata Redonda.
Al lugar se presentó Rafael Morales, director del Hospital Los Samanes, designado por la comisión para informar a los afectados."Ya los trabajos del muro están hechos y se paró el reboso. Recuerden que esto es un desalojo preventivo para evitar que si llueve el agua se salga nuevamente. Pero no podemos darles respuesta a todos al mismo tiempo. Algunos ya están en hoteles, otros tendrán que esperar porque hay hoteles que no nos han informado sobre el numero de habitaciones disponibles para ustedes", dijo Morales a los manifestantes.
Los afectados dijeron que algunos de los hoteles utilizados por la Gobernación de Aragua, para albergar a las familias que fueron desalojadas, son El Dólar, Lancelot, Aladdin y Micotti.
Ruthmery Barrios, una de las vecinas de Mata Redonda, contó que ha sido censada en varias oportunidades y que el martes, por fin, accedió a irse a un hotel, pero que las autoridades le comunicaron que ahora debe esperar, porque no hay habitaciones disponibles para irse junto con su hija.
"Las listas se desaparecieron, nos devolvieron de los hoteles porque llegaron otras personas con otras listas. Nosotros lo único que queremos es saber cuál es la situación real del muro. Dicen que no está fracturado, pero el agua se sigue saliendo por las olas", expresó Barrios.
Alojamiento gratis
En un recorrido por la ciudad de Maracay se visitaron tres de los hoteles escogidos por la gobernación para albergar a los desalojados de La Punta y Mata Redonda.
En 37 habitaciones del hotel Micotti fueron reubicadas 101 personas de 21 familias.
Una de las empleadas del hotel señalo que están utilizando habitaciones dobles y triples que tienen un costo diario de entre 580 y 680 bolívares. Así que por día de alojamiento el Gobierno de la entidad deberá pagar 24.260 bolívares, aproximadamente.
La empleada también dijo que todavía no les han cancelado el dinero por la estadía y que no saben por cuánto tiempo estarán las familias en el hotel. "Ya viene la temporada de beisbol y no tenemos cómo alojar a más personas. Ellos se encargan de darles la comida y el hotel de hacerle servicio a las habitaciones".
El hotel Aladdin recibió el martes a 30 familias que están en 44 habitaciones y ayer ocuparon otras 12, para un total de 56 habitaciones en servicio, informó la secretaria de Infraestructura y Atención al Ciudadano de la Gobernación, Doris Osorio. Agregó que las familias recibirán alimentación, hidratación y asistencia médica completamente gratis durante el tiempo que estén en los hoteles. Del hotel ayer estaban sacando de las habitaciones temáticas los potros y demás muebles exóticos.
Una de las encargadas del hotel, que pidió no citar su nombre, aseguró que el personal de la gobernación "simplemente llegó y alegó que necesitaban las habitaciones" y les prohibieron seguir prestando servicio comercial."Uno no puede estar diciendo nada por miedo.
Aún no sabemos cuánta gente van a meter aquí ni cuánto tiempo estarán. Tampoco sabemos qué hacer con el personal, porque si no prestamos servicio no les podemos pagar", agregó. Los precios de las habitaciones oscilan entre 240 y 440 bolívares por 12 horas.
En veremos
Algunos de los vecinos afectados por la situación de alerta del muro de contención decidieron que no esperarán por el Gobierno y acordaron sacar sus objetos personales de las casas y llevarlas a viviendas de otros familiares, mientras los reubican.
De las 638 familias que el Gobierno prometió trasladar a hoteles, muchas esperan que les digan para dónde las llevarán Víctor Bonilla, vecino de Mata Redonda, recordó que desde 1980 el peligro ha estado latente en el lago, pero que los últimos aguaceros en la región han dañado muchas viviendas."A nosotros nos entregaron un apartamento en Turmero y gracias a Dios que tenemos para donde irnos y no tenemos que salir para un hotel", añadió.
Andrés Bolívar, habitante de La Punta, afirmó que está anotado en una de las listas para irse a un hotel, pero le dijeron que debía esperar."Estoy sacando a mi familia y mis corotos para casa de otro pariente, pero tampoco voy a dejar la casa sola, porque aquí me quedan las rejas y los ventiladores de techo. No nos queda otra opción que esperar que nos den una solución", expresó.
Para los vecinos de estas urbanizaciones en riesgo, quejarse no está permitido.
Señalaron que cualquier reproche que hagan a las autoridades "podría significar perder la posibilidad de tener una vivienda nueva o pasar quién sabe cuánto tiempo en un hotel o refugio".
Situación se agrava en Güigüe
Bomberos y Protección Civil del municipio Carlos Arvelo inspeccionaron la carretera Valencia-Güigüe e informaron que están afectados 400 metros lineales de la carretera, con sentido a Güigüe.
La situación perjudica fundamentalmente a 90.000 personas, aproximadamente, de las parroquias Güigüe y Belén, sin contar con las que viven en Central Tacarigua en el municipio Arvelo.
Marta Yaguaramay, habitante de Güigüe, dijo que le preocupa la inundación que comienza a verse en la vía.
"Estamos en un valle y la comunicación que queda es por el estado Aragua y con el municipio Los Guayos.
Si colapsa esta ruta queda la carretera vieja, pero está muy deteriorada porque no le han dado mantenimiento", destacó.
Precisó que si el lago continúa creciendo, también dañará la carretera vieja. "No vamos a tener ningún tipo de acceso".
Argenis Sánchez, de la zona de Yuma, dijo que en las tardes el lago tiene un oleaje hacia la carretera. "Tenemos aquí una alcantarilla por donde pasa el agua y se devuelve, y ya toma la mitad de la vía", detalló.
Solicitó que coloquen señales de prevención en la zona del lago que bordea la carretera porque niños y jóvenes se están bañando allí, y como hubo casas aún quedan cabillas y bloques que pudieran causar cortaduras a los que entran por ese lado, sin contar con las enfermedades que produce la contaminación del agua.
Franklin López, presidente del Colegio de Ingenieros del estado Carabobo, ha señalado que las autoridades nacionales y regionales deberían construir un paso temporal por el inminente cierre que tendrá la vía ValenciaGüigüe.
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